Shabat Miketz / Januca

 Shabat Miketz / Januca


Un día como hoy, 23 de diciembre de 1972, hace 50 años, fallecía Abraham Joshua Heschel, uno de los teólogos judíos más destacados del siglo pasado.

El legado del Rabino Prof. Abraham Joshua Heschel es tan importante, que su vida y obra no se mantuvieron circunscriptas al ámbito religioso: el pensamiento hescheliano abarca el aspecto académico, humanista, filosófico y social; no solo profundizo en el alma del ritual y las tradiciones de la cultura judía, sino que exploro los alcances de lo divino y la voluntad humana. 1 Sin dudarlo, “si dentro de la categoría de los pensadores religiosos serios hubiese una subcategoría de pensadores revolucionarios, Heschel entraría dentro de ella”.

Fue un pensador comprometido, que supo condensar en su persona la erudición y el espíritu jasídico que lo nutrieron, con los ideales de la visión profetica, amalgamado a una gran vocación para el diálogo interreligioso y un ferviente humanismo, que se manifestó en la lucha por los derechos civiles de los afroamericanos como por su oposición a la guerra en Vietnam. 2

La vida y el pensamiento de Abraham Joshua Heschel, maestro del Rabino Marshall T. Meyer, es un legado incommensurable, una fuente de inspiración para abordar los desafíos que enfrenta el mundo judío y la humanidad en general en el siglo XXI.3

“El significado de haber sido creado a la imagen de D-s está velado por un enigma. Pero quizás podemos conjeturar que la intención había sido que el hombre fuera un testigo de D-s, un símbolo de D-s. Mirando al hombre, deberíamos sentir la presencia de D-s...”.

Estas palabras reflejan el pensamiento de A. J. Heschel: con su palabra escrita y oral, con sus acciones y actitudes, Heschel fue siempre un testigo de D-s.

La obligación del hombre de ser un testigo de D-s es el leitmotiv de su prolífica obra (17 libros, más de 60 ensayos y artículos traducidos a varios idiomas), en la que Heschel lucha contra la deshumanización del hombre moderno, contra la alienación y la indiferencia, y nos pide que enaltezcamos nuestras vidas, que le demos más sentido, más sensibilidad y más significado. 4

_________________________________________

La parasha de esta semana, nos trae a Iosef en la transformación más repentina y radical en la Torá: en un solo día, pasa de ser un prisionero olvidado en un pozo, a ser virrey de Egipto, el hombre más poderoso después del Faraón.

A la edad de 30 años, Iosef es responsable de la economía del reino. Viaja por todo el país, organiza la recolección del grano, y que sea almacenado de manera segura. Hay tanto grano que dejan de llevar registros porque no podían contarlo. Cuando terminan los años de abundancia, su posición se vuelve aún más poderosa. Todos recurren a él en busca de comida. Faraón mismo ordena al pueblo: “Id a José y haced lo que él os diga”. 5

Resulta inquietante suponer que gracias al poder que le fue conferido, parecería que el único gran mérito de Iosef es del de gozar de un lugar de privilegio, y desde allí, lograr administrar con eficiencia, cumpliendo la tarea que le fue asignada.

Pero nuestros Jajamin ZL se refieren a Iosef como Iosef haTzadik, un hombre íntegro que se mantuvo firme en sus principios aun en la diáspora. Como asegura la Guemara, “no es el lugar el que honra a la persona, sino la persona es quien honra al lugar donde está situado (Taanit 21b) 6 Sin importar el puesto que ocupara, ya sea al servicio de Potifar, administrador de la cárcel o funcionario del Faraón, Iosef tenía algo que lo distinguía.

Cuenta el Talmud (Sotá 36b) 7 que Rabí Jía bar Aba dijo en nombre de Rabí Iojanán: “Cuando el faraón dijo a Iosef ‘y sin tu mandato no habrá de levantar hombre alguno ni su mano ni su pie en toda la tierra de Egipto’, sus astrólogos le dijeron: ‘¿Acaso nombraras a un esclavo para que nos gobierne?’. El les dijo: ‘Percibo rasgos de realeza [ginnunei maljut] en él (porque inicialmente no era un esclavo)’ “.

De esto se deduce que Iosef lejos de ocultarse, recalca su fe y gratitud en D-s permanentemente.

Esta era su fortaleza. La fe de Iosef, su educación, sus valores, su corrección y su rectitud eran tan evidentes que, aún paganos como Potifar o Faraón, las podían distinguir y reconocer.

____________________________________

Tanto Heschel como Iosef, honraron con sus acciones el lugar que les toco habitar, y asi, cada uno en su tiempo, fueron Testigos de D-s, dignos exponentes de nuestro Pueblo sin importar donde estuvieran.

Heschel y Iosef haTzadik, vivieron vidas que hoy nos inspiran, porque nos demostraron que tener rasgos de realeza es no dar por sentado las cosas, sino que debemos perseverar haciendo el esfuerzo por elevar lo cotidiano, haciendo sagrados los momentos y siendo agradecidos por cada dia.

Un joven soñador llega a lo más alto…

Un activista reza con los pies...

 

Todo Am Israel es heredero de estas grandes historias.

 

Shabat Shalom!

 

Para Refua Shlema, pronta recuperación y sanación completa para todos los que la necesitan. Baruj ata Ad´ shomea tefila. Amen.

 

 

 

 

Fuentes consultadas:

1- Levenson, J. (1999). “Las contradicciones de A. J. Heschel”. En Maj’shavot/ Pensamientos, vol. 37, n. 1, pag. 23-29.

2- Recopilación de Prólogo, por Rab. Ariel Stofenmacher; Breve reseña biográfica de Abraham J. Heschel, por el Rabino Ernesto V. Yattah; Heschel y su impacto en América Latina, Rabino Ariel Stofenmacher y Rabino Mauricio Balter. https://majshavot.org/index.php?/revistas/ver/127

3- www.seminariorabinico.org/heschel/

4- Heschel, A.J. (1987) “Democracia y otros ensayos”. (Ediciones Seminario Rabínico Latinoamericano).

5- https://www.rabbisacks.org/covenant-conversation/mikketz/joseph-and-the-risks-of-power/

6- https://www.sefaria.org/Taanit.21b.6?lang=bi&with=all&lang2=en

7- https://www.sefaria.org/Sotah.36b.19?lang=bi&with=all&lang2=en

 

IMAGEN: Fotografía de John C. Goodwin. Heschel y King en el Cementerio Nacional de Arlington, 6 de febrero de 1968. https://jewishunpacked.com/mlks-jewish-connection/



 

Seba Cabrera Koch

  29 Kislev 5783 / 23 de Diciembre de 2022

Comentarios